Vivir en modo consciente es mucho mejor que vivir en modo automático. Cuando vivimos en modo automático, nuestras acciones y decisiones son el resultado de hábitos y patrones establecidos, sin que nos demos cuenta de lo que estamos haciendo o por qué lo hacemos. Esto puede llevar a la repetición de patrones de comportamiento negativos y limitantes, así como a la falta de creatividad e innovación.
Por otro lado, cuando vivimos en modo consciente, somos más conscientes de nuestros pensamientos, sentimientos, acciones y decisiones. Esto nos permite tomar decisiones más informadas, ser más creativos e innovadores, y mejorar nuestra calidad de vida en general.
Además, vivir en modo consciente también nos permite estar más presentes en el momento actual y disfrutar de la vida de manera más plena. Nos permite ser más conscientes de nuestras relaciones, de nuestro entorno y de las cosas que nos rodean, lo que puede llevar a una mayor apreciación y gratitud por la vida en general.
En resumen, vivir en modo consciente es mucho mejor que vivir en modo automático. Nos permite tomar decisiones más informadas, ser más creativos e innovadores, estar más presentes en el momento actual y disfrutar de la vida de manera más plena.